domingo, 12 de agosto de 2007

Lo que SI es y NO es el TLC

O, lo que SI dice y NO dice el TLC

1. El TLC es un instrumento para potenciar el crecimiento de la economía. El TLC N es un instrumento de distribución del ingreso; eso le corresponde al Estado hacerlo mediante una política fiscal que persiga alguna definición de justicia distributiva. Lo que resulta evidente es que sin crecimiento económico no hay riqueza para repartir.


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2. El TLC promueve la apertura de mercados clave para el desarrollo económico, como lo son telecomunicaciones y seguros. El TLC N promueve la privatización, la venta, ni el desmantelamiento de instituciones como el ICE y el INS. Si las instituciones son tan buenas como creemos, entonces no tienen que temer a la competencia.

3. El TLC, como documento legal que es, contiene definiciones de, entre otras cosas, lo que para efectos del tratado se entiende como el territorio nacional de las partes contratantes, y por ende, donde se aplica el convenio. EL TLC N cede el control de partes de nuestro territorio a otro país ni compromete la tan manoseada soberanía nacional.

4. El TLC reafirma el compromiso de Costa Rica de cumplir con una serie de convenios internacionales previamente firmados, como los de obtenciones vegetales y de propiedad intelectual. El TLC N compromete a Costa Rica en estos temas a niveles de cumplimiento o exigencias superiores a las claramente establecidas en el ordenamiento jurídico internacional y que habría que respetar independientemente de nuestra participación en el tratado comercial.

5. El TLC es un tratado internacional de idéntico rango para todas las partes contratantes. El TLC N es, como algunos neo-traductores del advenimiento de los últimos días nos han querido hacer creer, un Tratado para Costa Rica y un Convenio para los Estados Unidos. La Convención de Viena, que rige el Derecho de los tratados internacionales, es muy clara en este aspecto. No importa el nombre que el instrumento reciba: tratado, acuerdo, convenio, concordato, pacto, acta constitutiva, etc., todos son tratados desde el punto de vista de la Convención de Viena. Además, el mismo texto del TLC establece la equivalencia de términos.

6. El TLC N desmantela la legislación laboral costarricense ni reduce los derechos de los trabajadores. Muy por el contrario, el TLC establece que la legislación laboral de cada país debe de incorporar como mínimo los derechos de los trabajadores establecidos mediante convenios internacionales, en particular los de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Siendo que Costa Rica es suscriptor del convenio de la OIT, el TLC únicamente reafirma las obligaciones que de previo había adquirido el país en materia laboral. Otras disposiciones del TLC pretenden garantizar el acceso de los trabajadores a los tribunales para hacer valer sus derechos, y evitar que la debilitación de los derechos laborales se utilice como mecanismo para promover la inversión o el comercio. Nada de ello implica un debilitamiento de nuestra legislación laboral.

7. El TLC reconoce “el derecho de cada parte de establecer su propio nivel de protección ambiental y sus políticas y prioridades de desarrollo ambiental, así como de adoptar o modificar, consecuentemente, sus leyes y políticas ambientales”. Establece que “las partes reconocen que es inapropiado promover el comercio o la inversión mediante el debilitamiento o reducción de las protecciones contempladas en su legislación ambiental interna”. Y por si fuera poco, manifiesta el TLC que “ninguna disposición en este capítulo se interpretará en el sentido de facultar a las autoridades de una Parte para realizar actividades orientadas a hacer cumplir la legislación ambiental en el territorio de otra Parte”. Lo que aparece entre comillas son citas textuales del TLC.

8. El TLC establece que ninguno de los derechos del inversionista extranjero estará por encima de sus obligaciones en materia ambiental, estipulando claramente que los países tienen el derecho a exigir el cumplimiento de su propia legislación ambiental. El TLC N debilita nuestra legislación ambiental, sino que por el contrario, aclara que el inversionista no podrá ampararse en las regulaciones ambientales más laxas de otro(s) país(es) en sus potenciales disputas con el nuestro.

9. El TLC establece el marco legal que se aplicará para regular las relaciones entre los inversionistas y los Estados contratantes, bajo el principio de que “cada parte otorgará a las inversiones cubiertas un trato acorde con el derecho internacional consuetudinario”. Esto quiere decir, nuevamente, que el país se compromete a respetar el ordenamiento jurídico internacional, cosa que debe de hacer independientemente de su participación en el Tratado. Los elementos de ese derecho internacional consuetudinario a los que hace referencia el TLC son algunos como el Convenio sobre el arreglo de diferencias relativas a inversiones (CIADI), Convención de las Naciones Unidas sobre el Reconocimiento y Ejecución de las Sentencias Arbitrales Extranjeras, Convención Interamericana sobre Arbitraje Comercial Internacional, y las Reglas de Arbitraje de la Convención de las Naciones Unidas sobre Derecho Internacional Mercantil (CNUDMI). El TLC N implica ceder soberanía a un poder extranjero, sino reconocer que se es parte respetuosa del entramado de las relaciones internacionales.

10. El TLC N es la panacea para todos nuestros males. Tampoco es el instrumento satánico que nos hará perder la cultura popular, la identidad costarricense, ni la soberanía nacional. El TLC SI es una herramienta que, junto con un proyecto más amplio de desarrollo económico con solidaridad social, impulsará, gracias al ingenio, esfuerzo y trabajo de todos los costarricenses, un crecimiento sostenido que redunde en beneficios para todos. La ausencia de ese proyecto amplio de desarrollo no es achacable al TLC, sino a todos los costarricenses. Vetar el TLC por la ausencia del proyecto de desarrollo es condenar al país al subdesarrollo. Si la estrategia que queremos requiere de dos partes (herramienta de crecimiento y política de solidaridad), aprobemos la primera y aboquémonos a lograr la segunda. N a la pobreza. N al estancamiento. Sí al PRGRES.

8 comentarios:

  1. Y con de-crecimiento ecologico, con trabas para el crecimiento moral, con problemas legales internacionales?...
    Su opinion me parece valida, de hecho por un tiempo creí lo mismo... pero desde cuando el dinero debe ser la prioridad del ser humano?

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  2. Evidentemente, si el Anónimo comentarista no se leyó el artículo que comentó (que es de un par de paginitas, más fácil de digerir que las 11.000 páginas del Tratado), menos se habrá leído el TLC que "ya no apoya".

    Si se hubiera leído los puntos 7 y 8 no hubiera hablado de decrecimiento ecológico, y si se hubiera leído los puntos 3, 4, 5, y 9 entendería que no hay "problemas legales internacionales" de qué hablar. No hay peor forma de desinformado que el desinformado opinionado.... ¡Si por lo menos esgrimiera argumentos y no generalizaciones sin sustento!

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  3. Esta parte muestra ignorancia o ceguera sobre cómo funcionan las cosas en el país:

    "Vetar el TLC por la ausencia del proyecto de desarrollo es condenar al país al subdesarrollo. Si la estrategia que queremos requiere de dos partes (herramienta de crecimiento y política de solidaridad), aprobemos la primera y aboquémonos a lograr la segunda"

    Es evidente que hay una clase tradicionalmente rica que gobierna en Costa Rica y que no ha hecho lo suficiente en los últimos 30 años en favor de la política de solidaridad. De hecho ha hecho todo lo contrario a base de inacción, inoperancia y muchas veces clara mala fe. Quien se atreva a negar eso es porque no conoce la Costa Rica de la mayoría, está ciego o es muy tonto.

    Esa clase no ha cambiado ni cambiará, sigue siendo la misma y no ha hecho ninguna promesa seria ni ha manifestado mayor interés de que se abocará a luchar por el sistema social solidario del país. Esa clase sigue prefiriendo negociar con sindicatos y políticos corruptos, en lugar de oir la voz del pueblo que los elige, prefiere seguir manteniendo privilegios a burócratas y amigos antes que arreglar las cosas, prefiere el discurso demagógico a la acción enérgica y eficaz. Votar a favor del TLC es darle una vez más la confianza a quienes no la merecen.

    Aun si el TLC favoreciera a todos en igual porcentaje, las clases ricas (y entre ellas la que gobierna) serán las más favorecidas. Cualquiera que sepa lo que cuesta el dinero y lo que se puede comprar con él sabe que 1% del millón de dólares del inversionista es mucho más que 1% de los 100 mil pesos que gana el jornalero. 10 mil dólares hacen una diferencia mucho mayor que mil pesos.

    Esto significa que a como están las cosas los grupos ricos y poderosos tendrán más poder y los pobres y débiles menos. Cualquiera que haya vivido un poquito de tiempo en el mundo real sabe que las leyes están en general a favor del poderoso, que son un producto de luchas de poder y que sólo porque en la democracia se permite, no sin grandes obstáculos y generalmente necesitando un aliado interno en el poder, que los débiles se asocien y luchen juntos por sus derechos es que hay un sistema donde un sociedad más o menos justa se puede mantener. Mientras el balance de poder recaiga sobre la clase tradicional rica en Costa Rica y ésta no tenga una buena razón para trabajar por un sistema más justo las cosas no cambiarán y probablemente sólo empeorarán hasta que sea inaguantable.

    Lo primero es lo primero: se necesita fortalecer POLITICAMENTE (no necesariamente económicamente) la democracia, la justicia y la solidaridad en Costa Rica. Hacer otra cosa es perpetuar el status-quo.

    Firmar el TLC es entronizar ese status-quo aun más pues equivale a que las clases pobres den primero el premio antes de garantizarse la recompensa. Cualquier persona sensata sabe que si uno paga por adelantado sin tener garantías es poco probable que se haga el trabajo. Firmar el TLC es pagar por adelantado confiando estúpidamente en promesas de quienes nunca han cumplido. Un voto a favor del TLC por parte del grueso del pueblo de Costa Rica que no es ni rico ni bien conectado es totalmente insensato.

    Sin garantías de sistema solidario está condenado al subdesarrollo en el que no está más sumida sólo porque en algún momento de la historia se pusieron las prioridades como deben ser. Es hora de poner las prioridades como son y dejar de ser tan idiotas.

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  4. Corrijo el último párrafo:

    Sin garantías de sistema solidario COSTA RICA está condenada al subdesarrollo en el que no está más sumida sólo porque en algún momento de la historia se pusieron las prioridades como deben ser. Es hora de poner las prioridades como son y dejar de ser tan idiotas.

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  5. Uno de los problemas que tiene el TLC son los arbitrajes internacionales.

    En este momento una decisión que tome el gobierno puede costarnos "la estupidez" del funcionario.

    Después del TLC, un arbitraje internacional por no permitir a "X" compañía buscar petroleo, nos puede costar tres veces el Producto Interno Bruto.

    Y nos tocaría pagarlo a TODOS los ticos.

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  6. Lo que dicen los puntos de este articulo es exactamente lo mismo que lo que dicen los articulos de intelectuales q estan en contra, sin embargo usted, no se si en afán de resumirlo, no lo fundamenta tan bien como muchos de ellos. Así que, si no tengo que creerme lo que me dicen los otros... con mucho menos razon lo q ud dice acá.
    No tengo porque esgrimir, prefiero estrechar manos. Se apruebe o no el tratado, es importante promover la union, no la clasificacion: nosotros los inteligentes, ellos los ilusos...(para los dos lados) Cada quien tendra sus razones, y en nuestro hermoso país se puede discutir con ellas... pero esgrimir? pues antes de comenzar me rindo, porque jamás lo haría.
    En el bien o en el mal, si costa rica se sigue separando, no nos salva ni el libre comercio.

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  7. Que pereza me dá con la gente que sigue y sigue quejandose de "los de siempre en el poder" y no hace personalmente nada para cambiar esos de siemrpe que están en el poder.

    Criticar desde la inoperancia es muy sencillo, pero la realidad es que si nos sentimos tan comprometidos con una causa luchamos por ella, y ellos no se van a salir de ahí solos, tienen que sacarlos con trabajo, argumentos y esfuerzos todos esos que se quejan de su corrupción, y demostrar porqué tenían razón en tanta quejadera.

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  8. Excelente entrada, y excelentes comentarios...

    Obviamente, a los compas que postean anónimos, de más esta decirles que su opinion carece un cinco de credibilidad y asi no van a convencer a nadie...

    SI Costa Rica!!!

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