sábado, 1 de julio de 2006

Cuando las computadoras nos embrutecen

Cuando yo apenas aprendía a hacer multiplicaciones con multiplicandos de tres dígitos, recuerdo que hacía competencias con mi mamá: ella me dictaba una operación, digamos 380 x 729, y mientras yo la resolvía a mano, ella lo hacía con la calculadora. Al principio siempre ganaba la calculadora. Pero eventualmente desarrollé un método mental que me permitió empezar a ganarle al combo “mamá con calculadora”. En aquella época las calculadoras más sencillas eran tremendamente caras; mi mamá tenía una porque estudiaba en la Universidad, pero a los niños ni siquiera se nos permitía tocarlas; para resolver nuestros problemas de cálculo teníamos que usar lápiz, papel, y nuestros cerebritos. Y vaya que lo lográbamos. Los tiempos han cambiado, y hoy en día si la operación se excede de la tabla del 10, inmediatamente saco la calculadora y ni siquiera me molesto en pensar.

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Se supone que las computadoras llegaron para ayudarnos a avanzar, y en muchos campos eso es cierto. Tal vez un güila avezado pueda hacer multiplicaciones de tres dígitos en su cabeza en lo que tarda una persona normal en digitar la operación en una calculadora, pero los cálculos que requiere hacer Franklin Chang para el desarrollo de su motor de plasma necesario para mandar seres humanos a Marte no serían ni siquiera remotamente posibles si hubiera que hacerlos “a mano”.

Lamentablemente, tan marcada es la tendencia del tico promedio a querer las cosas fáciles, que en nuestro país en muchas ocasiones usamos las computadoras de excusa para retroceder. ¿Cuántos de nosotros hemos escuchado la frase “no hay sistema” o “el sistema está caído” como sentencia final de la imposibilidad de hacer alguna gestión o trámite? Todo esto viene a colación porque el día de ayer me presenté la Banco Privado de Comercio Exterior (ver Catch 22 a la tica) a pagar la cuenta de la electricidad de mi negocio en San Eustaquio (ver Siete semanas perdidas). Al llegar la banco, a eso de las 11:00 a.m., me informó el cajero que “en estos momentos el banco no tiene sistema con Fuerza y Luz”, y que por esa razón no se podía pagar la cuenta. Considerando que yo tendría que regresar al Banco a hacer otros mandados por la tarde, no le di mayor importancia y me fui.

Al regresar, a eso de las 4:00 p.m., y siendo que ayer era fin de mes, se podrán ustedes imaginar que la fila le daba la vuelta al Estadio Olímpico de Berlín. Después de casi cuarenta y cinco minutos de espera, finalmente me tocó el turno, y todo para que el cajero me dijera que “el sistema de la CNFL está caído”. Después de una estéril conversación, durante la cual me quejé de que desde la mañana estaba caído y para qué está el personal de informática si no pueden resolver algo tan esencial, me acordé de aquella frase que dice que más sabe el diablo por viejo que por diablo. Recordándome que hace algunos años no existía internet y aun así se podían pagar las cuentas de los servicios públicos en los bancos, le pedí al cajero que se olvidara del “sistema” y que me cobrara el servicio “a la antigua”. ¿Cómo es eso, don Dean?, me preguntó. Elemental, mi querido Watson, le respondí. Usted me cobra y acredita el dinero a la cuenta de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz, y como resultado me emite un comprobante de depósito donde conste que ese depósito es por el pago correspondiente a la factura número 8765432190 – I65 del medidor número 666 – 99 perteneciente a “El Chinamo de Dean S.A.”. “Pero eso no se puede hacer”, me respondió mi querido Watson, “porque al no tener sistema no puedo ver su recibo y no puedo acreditar los montos a las cuentas correspondientes”. “Pero, Watson”, le dije yo, “aquí traigo yo el recibo y de él puede usted sacar toda la información: localización, número de medidor, número de factura, número de cliente, total por pagar, fecha de vencimiento, nombre del abonado, etc.”. “Si, pero sin sistema no puedo hacerlo”. Y punto. Usar la cabeza es demasiado pedir. Es más fácil culpar a la computadora de nuestra propia vagancia e imbecilidad.

Y para que al menos en este rincón de nuestra bella patria no podamos ser acusados de que las computadoras nos embrutecen, invito a mis lectores a hacer de este un post interactivo, dejando en sus comentarios sus historias favoritas de cosas que no pudieron lograr “porque el sistema está caído” o alguna otra excusa similar.

11 comentarios:

  1. La semana pasada fui a un banco a abrir una cuenta de ahorros. Me exigiían saber el origen de los ahorros y otros datos inútiles porque si no el sistema no les permitía abrir la cuenta. Les pregunté que qué pasaba si oles daba datos falsos de todo. Aceptaron que no importaba siempre y cuando les diera lo datos para el sistema... y así fue.

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  2. Ohhhh el origen de los fondos en un banco! Cuento de nunca acabar! Pero lo más ridículo del caso es que para abrir una cuenta de ahorros con $100 en un banco privado (Banex) piden referencias bancarias!!! Así es!! Piden estados de cuenta de otros bancos... Intenté alegar que era la primera cuenta de ahorros que abría en mi vida y que por lo tanto no tenía referencias bancarias.... Y pues.... salí del banco con mi cédula, mi recibo de agua,luz o teléfono.... y mis $100 para guardar bajo el colchón!

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  3. Alguna vez han intentado darse un gusto para bajarse el Estrés? Eso intenté en la POPS de Paseo de Las Flores, el día que la maquinita de pasar tarjetas me denegó 5 tarjetas, 2 de crédito y 3 de débito, todas ellas con fondos suficientes para los 1,300 colones que costaba el milk shake.(decía intente de nuevo, pero la muchacha insistía que estaba denegada). Valga aclarar que no me se el PIN para retirar del cajero, y que por sacar plata, como me sugirió la muchacha, cobran $1... Así que saqué un billetillo de $5 que andaba dando vueltas por ahi... Y... Ohhh sorpresa!!! No reciben dólares!! Después de acabarme el Milk Shake, y de insistirles en que pasaran la tarjeta por teléfono, como hacían cuando no existían las maquinitas.... Dejé el billete de $5 en el mostrador y me fui!! A buscar otro des-estresante que no involucre dinero!

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  4. Sia' tan hp.

    Como estudiante de la UCR que soy, no es de extrañar la plétora de historias que me se porque el obsoleto sistema de rellenar bolitas en hojas de matrícula falló, y por tanto, el compañero o compañera salió con cursos de enfermería matriculados, siendo estudiante de economía.

    O bien, la vez que jugué de vivo y fui a un banco estatal a pagar mi recibo de cobro de matrícula. Cuando fui a pagar el segundo, porque sí, sacan dos recibos, es decir, hay que ir a pagar dos veces la misma putada, seguro para ayudarle a los más alcanzados, salí evidentemente moroso, porque al banco estatal se le olvidó acreditar a la cuenta de la UCR mi pago.

    La última vez que salí del país, en el aeropuerto internacional juan santamaría, nombre que le queda grande a esa pista de aterrizaje de avionetas, se formó un presón en abosultamente todos los check-in counters, porque el banco estatal encargado de cobrar los impuestos de salida cuenta con una única caja, con un único sistema, y una única oficina en todo el aeropuerto. Es evidente que en ese momento sólo se podía pagar en ese banco, y en el acto, no por adelantado.

    Inclusive, hubo una vez que los parqueos de la ucr estuvieron algo vacíos, ¡porque las agujas que dan paso a los parqueos no tenían sistema! ¡De antología!

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  5. una razon mas para q me guste este blog

    Pregunta al aire? porq no lo pago por internet?

    Eso de ir al banco para esas cosas, debido a las multiples historias como la suya, son cosa del pasado.

    Por la misma razon, deje de visitar bancos publicos hace ya mas o menos el mismo lapso.

    Lo peor de todo, es q mis padres tienen cuentas en Bancredito, asi q cuando es urgente el cambio de cheque, me toca la fila interminable... encima de todo, por algun arzon q todavia no entiendo, mi firma no sale en el sistema y siempre deben llamar a la sucursal donde se abrio la cuenta y q manden el fax con mi firma... minimo una hora para cambiar cheque (q en teoria es urgente)

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  6. Creo que el uso de bancos públicos actualmente es para viejitos y para personas con mucho tiempo y paciencia. Cualquier persona que valore su tiempo y su calidad de vida no va a ir a abrir una cuenta en un banco del estado, claro hay personas que les depositan el salario ahi.. Que ahuevado!!! Yo ni a putas me como una fila del BCR o del Banco Nacional(o sus cajeros en días de pago) es de nunca terminar. En pocas palabras, si la gente de este país no estuviera obligada a usarlos, no creo que fueran muy competitivos. Si cuesta encontrar en un banco privado que de buen servicio en todas sus extensiones, ahora va a ir uno a un banco del estado a que se lo lleve putas...yo por eso uso el BANCO XXXXXX, y la verdad es que si quieren ver que me lleve la gran puta..mandeme a hacer una vuelta a un banco del estado.. o a cualquier institución del Estado...es una MIERDA..

    http://carepicha.blogspot.com/

    P.D En la vara de ticoblogs.com sale un mae diciendo que este blog esta muy polarizado, pero quien les ha dicho que uno hace un blog para caerle bien a todo mundo..y que lo diga yo (carepicha blog)

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  7. Recuerdo un articulo de Rodolfo Arias en La Nación donde contaba su afición a rellenar de datos ridiculos los formularios que suelen dar en las instituciones o empresas para realizar un tramite, como una manera de probar que nadie lee al final lo que se pone en esos papeles ni tiene la minima utilidad (salvo para que lo llamen para ofrecerle tiempos compartidos truculentos). Así el hombre ponía cosas como: SEXO: AMBIGUO, COLOR DE PIEL: CHOCOLATOSA, FAZ: SOSPECHOSA, TELEFONO: 800-CHOCHO,
    y al final nadie se perctaba de la broma ni tenía mayor consecuencia. Me he dado el gusto de cancelar un para de tarjetas de credito por ridiculeces como llamar a preguntar al SAC a nombre de quien se hace el cheque de pago a la tarjeta, darme el nombre y llegar a la caja (después de una fila descomunal) y ser rechazado por el cajero porque ahora se hace a nombre de otra sociedad (por supuesto no vale llamar al gerente (generalmente un recien graduado) y reclamar porque nadie se hace responsable) y se debe hacer la fila de nuevo y pagar los intereses porque al día siguiente se pasó la fecha de pago....cosillas como esas....muy veredes de los bancos privados...

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  8. Pero la buena ortografía, el uso de tildes y el saber escribir como alguien que tiene más de 13 años tiene aún mucha importancia. No es quién lo hace más rápido, es quién me entretiene mientras espero por un buen servicio...

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  9. Dejando un poquito de lado el tema de los bancos y compañías cuyos sistemas de hecho pasan más caídos que levantados, quisiera hacer un llamado a la atención sobre uso de la calculadora que Dean ha hecho en su comentario.

    No quiero dejar pasar por alto el esfuerzo que hacen profesores de secundaria (y de "institutos de aprendizaje") por enseñarle a sus alumnos el procedimiento para atravesar el oscuro valle del examen de bachillerato de Matemática (sin hacer uso de las matemáticas), solamente haciendo uso de la calculadora como medio de solución de todos (o la gran mayoría de) los problemas. Aunque en el Ministerio de Educación han intentado resolver esta situación con algunas variaciones en los enunciados, aún el examen sigue estando a merced de ser aprobado por gentes que mecánicamente utilizan su calculadora y no sus mentes, en una materia que realmente nunca llegan a comprender.

    Sugiero que se debería suspender el uso de la calculadora en el examen de bachillerato de Matemática, pero esto significaría una población estudiantil aprobada del 10% en el mejor de los casos y dejaría mucho de qué hablar de nuestro "valioso" sistema educativo. En otros países como Taiwan se enseña la matemática básica (como la del colegio) se hace sin calculadora y se enseña la materia y no a resolver de manera estúpida UN examen: objetivos completamente diferentes.

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