miércoles, 3 de octubre de 2012

Un ejercicio en cinismo

No hay otro nombre para las opiniones vertidas en el artículo de Ottón Solís publicado en La Nación de hoy, y la entrevista que le hizo el periodista Carlos Villalobos, publicada en ese mismo diario el pasado jueves 27 de setiembre.  El autoproclamado paladín de la moral y la decencia en la política costarricense, no ve falta ética alguna en haberle cobrado al Tribunal Supremo de Elecciones el trabajo voluntario de los colaboradores de su partido durante la última campaña electoral.  El colocho mental que se le tiene que haber formado para encontrar una explicación tan burda y hacerla sonar bien no se le va a quitar ni con este peine.


Para que estemos claros, esto es lo que pasó: el PAC solicitó a personas que estaban trabajando de manera voluntaria en campaña, que emitieran facturas por los servicios brindados al Partido.  Esas facturas difícilmente hubieran sido pagadas a sus emisores, ya que se respaldaban con bonos “B” de la deuda política, que son bonos cuyo fondeo depende de que los resultados en las urnas fueran significativamente mejores que los previstos en las encuestas.  Sin embargo, el Partido podía – como en efecto lo hizo – intentar cobrarlas al TSE como parte de sus gastos de campaña a ser cubiertos con la deuda política. 

Si le agregamos un poco de malicia indígena a la descripción de los hechos, tendríamos que decir que el PAC de Ottón Solís Candidato le solicitó a algunos de sus voluntarios (a los de más confianza, candidatos a diputado) que se prestaran para engañar al TSE, y por ende al fisco costarricense. Bonita cosa para el partido cuyas dos banderas principales son el adecentamiento de la función pública, y el aumento de impuestos como solución principal (¿única?) para el déficit fiscal.  ¿Por qué decimos que es un engaño al TSE?    Ottón Solís dice que es una doble donación del voluntario: por una parte de tiempo y trabajo, y por la otra de dinero. No es cierto, y el Sr. Solís es un cascarudo de marca mayor. Porque al presentar una factura por un trabajo que no se pensaba cobrar, se pretendía robar dinero – las cosas por su nombre – a los contribuyentes, sin distingo de color político, para hacerle frente a OTROS gastos del partido y de su campaña.

La idea, como varios de los involucrados han manifestado, era que ellos NUNCA recibirían el dinero; ni siquiera para hacer la ficción de cobrar sus servicios y luego donar el dinero al Partido. ¿Por qué? Porque haberlo hecho de esa manera los hubiera obligado a tributar. Y entonces el robo al fisco es por partida doble.

Entendámonos: lo que el PAC hizo con estas facturas es la misma cochinada que hizo Liberación Nacional con los contratos fraudulentos de transportes: cobrarle al TSE servicios prestados al partido de manera gratuita. Ninguna cantidad de explicaciones de Ottón Solís podría convencernos de que hay alguna diferencia, a no ser porque en un caso los transportistas del PLN fueron víctimas tanto como el resto de los costarricenses, mientras que en el otro, los hoy diputados del PAC fueron cómplices del intento de estafa. Se trata, en cualquiera de los dos casos, de fraude con recursos públicos.

Nos dice Ottón que como el PAC se autoimpuso limitaciones al origen y monto de las donaciones, “en ese marco de austeridad y sacrificio […] no considero carente de ética haberle pedido a partidarios que facturaran trabajo y servicios efectivamente ejecutados, y que si les era posible no cobraran para que el partido tuviera recursos”. Es una vileza de Ottón Solís defender los chanchullos de su Partido con la excusa de que su modus operandi financiero era “muchos dando poco en lugar de pocos dando mucho”. Es un argumento sacado del librillo chavista del siglo XXI: si las porquerías se hacen en nombre de los pobres (o de la pobreza), entonces son actos de justicia divina (vox populi vox Dei), y por ende la ética y la moral exigibles a los mortales – presuntamente los de “las billeteras gruesas de pocos” – no deben de ser escollo.

Llama poderosamente la atención la cautela de don Ottón para calificar los actos de su partido que hoy son investigados. Cuando le preguntan si el hecho de que el partido cobre facturas que no fueron pagadas riñe con la ética o la legalidad, su respuesta es un lacónico “hay que ver” o un cínico “eso es especular”. Pero cuando son otros los partidos que recurren a la contabilidad creativa – estoy siendo sarcástico, por si no le cayó la cora – para justificar cobros al TSE, él y los diputados de su Partido que aceptaron firmar los contratos disfrazados de Caperucita Roja, son los primeros y más estridentes denunciantes. Enhorabuena que hagan todas las denuncias necesarias, pero quien tiene techo de vidrio mejor haría al no arrojar piedras a sus vecinos.

Dice Ottón en su artículo de hoy – después de haber desarrollado un argumento tan alambicado que ni él mismo lo ha de entender – que “no es el Ministerio de Hacienda el que le regala dinero al partido”.  Tiene razón el grandísimo carebarro. Somos todos los imbéciles que pagamos impuestos en este, el más feliz país del mundo.

12 comentarios:

  1. Diay, entonces para que tanto enredo. Siguiendo la argumentación de Ottón(tillo), los "donadores" cobraban para donar esa plata al partido... pero, no hubiera sido más fácil simplemente no cobrar nada, y en cambio cobrar al TSE las cosas que se compraron con la plata supuestamente donada? Demasiado transparente para un partido "progre"?

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  2. Terox, es que la pregunta no es esa, sino: ¿Qué diantres es lo que compran los partidos políticos que no se atreven a reportarlo al TSE y se ven obligados a inventarse facturas falsas para recuperar el dinero?

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  3. Dean, tiene razón que esto en un ejercicio de cinismo. Pero aquí el que genera el cinismo no son los partidos. Es el absurdo, engorroso, arbitrario e improductivo sistema de repartición de la Deuda Política que hace y ha hecho siempre el TSE.

    El TSE ha convertido un sistema que en otros países se resuelve en las primeras semanas después de la elección, en un alambicado sistema de bonos electorales, y pautas de qué acepta o no como gasto electoral totalmente arbitrarias (Otton menciona ahí mismo el caso de la campaña anterior, cuando el TSE no aceptó facturas de pago cuando ellos SI cancelaron los pagos por servicios).

    En ninguna parte del sitio web del TSE aparece por ejemplo, un instructivo de cómo presentar una liquidación de gastos a gusto y sentir del TSE. Se podría decir que en este caso, la culpa es de los diputados, que aprueban las pésimas leyes que nos rigen. Pero el problema es que todo cambio en la legislación debe tener el visto bueno del TSE.

    Usted sabe que toda institución burocrática busca cómo perpetuarse y ganar poder. e parece que habría que tener una visión más crítica del TSE y lo que hace. Porque en realidad, a lo que nos estamos dirigiendo es a un sistema donde será el TSE el único autorizado a gastar dinero en campañas electorales. Y eso a mí no me parece adecuado, como tampoco me parece las absurdas restricciones que se implantan alrededor del día de las elecciones, como la de publicar sondeos. Eso es creer que los ciudadanos somos bastante tontos para no saber cómo elegir adecuadamente.

    La liquidación de gastos que hace el TSE es, además de arbitraria, engorrosa e inútil. Lo único para lo que sirve es para dar trabajo a montón de contadores que revisa todo papelito y factura de todos los partidos. Y aún así salen estos "goles".

    Qué es lo que hacen las democracias más serias y que valoran más el tiempo? En Chile por ejemplo, se establece la contribución a base de un monto de dinero por votante. A éste tienen derecho los partidos que obtienen cierto número de votos por encima de un porcentaje. Una vez terminadas las elecciones, y certificado el resultado, cada partido recibe su contribución, determinada al multiplicar el número de votos obtenidos por la contribución por voto. Esto se hace dentro de la primera semana después de las elecciones.

    En Australia, se aplica algo similar: se fija una contribución por votante obtenido, siempre el cnadidato o partido haya recibido más del 4% de la votación. El dinero se entrega dentro de los 20 primeros días después de las elecciones, en forma preliminar. Luego, cuando los resutlados son oficiales, se hace el ajuste necesario.

    En ambos países nunca han salido a flote escándalos por financiamiento. Esto es así porque (A) Los organismos electorales hacen auditorías frecuentes y sin aviso y (B) no pierden tiempo en revisiones totales que a nada llevan. Y que de por sí son avisadas!

    Qué pasa en nuestro terruño? Pues, como somos buenos para enredar lo que es simple, nos pasamos la gran parte del período posterior a la elección en investigar si los partidos de verdad utilizaron el dinero bien, pero de la peor forma posible. Ni siquiera con una auditoría normal y corriente. No señor. Aquí hay que gastar innumerables horas hombre para escarbar cada bendita factura y pago hecho por cada partido para encontrar al final qué? Supuestos movimientos raros que en una elección se aprueban y en otra no, y con nuevos llamados a cambiar y reformar las leyes. Para seguir con la misma novela los 4 años siguientes.

    No hay necesidad de inventar el agua tibia. Hay mucho mejores formas de fiscalizar los gastos de los partidos sin necesidad de prolongar esta novela de investigaciones.

    Y la gente debería entender más sobre las leyes. Y saber que la propaganda política, por más mal que caiga, es una actividad legítima y financiada por el Estado. Si no se quiere que sea así, se puede tomar el camino miope de eliminar la (de por sí exigua) contribución Estatal a la campaña electoral y dejar que sean los ricos los que aporten el dinero.

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  4. Tiene usted mucha razón, Jorge, hay que entrarle al tema del TSE y del financiamiento de la campaña. Me gusta la idea australiana/chilena, y en términos generales concuerdo con lo que usted ha dicho. Sin embargo esquivó hablar sobre el tema del artículo en sí, y es el cinismo y la doble moral de Ottón Solís, quien justamente es uno de esos políticos más inclinados a poner controles ridículos como los del TSE que un sistema ordenado como el que usted describe.

    Si es paladín de la ética, entonces tiene que cumplir las reglas con las que se metió a jugar, aunque sean ridículas. Y si para colmo de males esas mismas reglas le han servido para montar una persecución política a sus adversarios, ahora debe de pagar con un trago de su propia medicina.

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    1. Bueno, unirme a ese sentimiento de Scahudenfreude respecto a Ottón lo encontré poco importante. Si en el peor de los casos Ottón es un hipócrita, la verda es que no es el peor mal que aqueja la sociedad actual. Después de todo, es mejor tener doble moral que no moral del todo, no lo cree así?

      Sin comulgar con el pensamiento del PAC o de Solís, me parece que su ascenso al poder no sería una catástrofe para el país. La verdad es que no hay diferencias sustanciales con lo que otras personas de distinto signo político piensan. Son en este sentido moderados de izquierda. Respecto a la persecución política, Cuántas vidas han sido arruinadas por Ottón? La República sobrevivió y sobrevivirá.

      Respecto a la famosa frase de lo legalmente posible pero éticamente cuestionable: no hay duda que la Ética, que podría definirse como el apego a normas no sancionables, abarca un espacio más amplio que las leyes. Pero también es cierto que vivimos bajo el principio de lo que no es legalmente prohibido está permitido. De lo contrario, estaríamos ante un sistema totalitario, donde todo sería ilegal, excepto lo explícitametne permitido por ley.

      Lo que ha hecho el PAC, y lo que hicieron el PLN, el Libertario y otros es reclamar por un derecho que consideran les pertenece. LA legislación Electoral contempla la posibilidad de recibir dinero estatal por los gastos de Propaganda y de signos externos, entre otros. Es decir, producir y pegar banderas. Y se menciona propaganda explícitamente.

      El problema esuqe mucha gente tiene problema con que los partidos gasten dinero en esos rubros, que los consideran superficiales. Eso da espacio para debatir. Pero la verda es que la pol´tiica moderna requiere de esos métodos y recursos, quiérase o no. O si no se quiere, ahí está la capacidad de hacerlo por medio de cambiar la ley.

      Pero este juego de acusaciones mutuas por gastos de cmapaña la verdad es que no ayuda nada a mejorar el sistema, y daña mucho más la alicaída reputación de los políticos, sin sacar nada provechoso. lagente debe entender que los políticos son seres humanos como todos los demás, con sus fortalezas y debilidades. Y lo mejor es que, en lugar de esperar que ángeles caigan del cielo a goberanrnos, crear un sistema de incentivos donde hasta el peor político le sea más beneficioso omportarse como un buen político.

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    2. El juego de acusaciones sirve, y mucho, para ver qué tal se comportan los acusados (y hasta los acusadores).

      Ahora, ¿por qué no concuerdan en una reforma del sistema de deuda que lo haga menos engorros y más eficiente? Ellos tienen la papa en la mano...

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  5. Ambas cosas: Creo que Ottón es un cara de barro y por otra parte, que el mecanismo de pago del TSE es innecesariamente engorroso. Acerca de lo primero sin duda la lógica moral que Ottón ha demostrado en más de una década de vida del PAC se resquebrajó ruidosamente en esta oportunidad. Más me dio la impresión de quien quiere salir de un charco a toda prisa, no importando la pringazón que provoque. Me recuerda el caso reciente de Price Smart y la señora accidentada, que cobraron facturas de una enfermera que es la nuera, que cualquiera sabe que una nuera jamás le cobrará a la suegra por cuidarla. Es similar lo que hicieron dirigentes del PAC, facturar servicios que no cobraron para que su partido sí se lo hiciera al Estado. En ambos casos es un robo.

    En cuanto a lo otro, estoy de acuerdo que cada votante debe tener un valor luego de un mínimo de votación lograda. Por cada voto logrado así es la contribución. Allá cada partido la eficiencia con que maneje esos recursos, de modo que incluso pueda reservar para darle continuidad al partido y que no se convierta en una simple máquina electroal, como ocurre ahora. Podría reservar también, digamos, para capacitación y educación.

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    1. Yo a mi suegra si le cobro por cuidarla, y el doble!

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  6. No han entendido, los del PLN, firmaron los contratos y recibieron su plata e hicieron con ella lo que quisieron, incluso regalarla, pero eran menos de 300 Mil, entonces no hay nada.Porque se rebaja la gasolina, como parte del contrario.
    El Pac, puso a los ciudadanos a firmar papeles, algunos en blanco, no les pagó y cogieron los papeles y después de las elecciones se cobraron al T S E, simulando que hubieran pagado, o sea engañaron para hacerse con la plata del pueblo, simulando un gasto que no existió

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  7. Por desgracia, en este juego suma cero en que ha caído la política nacional, simepre será bueno poder acusar al contrincante de irregularidades que nacen más de la ineficiencia del sistema que otra cosa. Y sin contar la ineptitud de la propai clase política, que cada reforma al financiameinto electoral trae nuevos problemas.

    Y, a un nivel más siniestro, es una buena forma de amedrentar a los donantes o contribuyentes del partido contrario. Incluso cuando no es mera donación, sino financiamiento.

    El ejemplo del Movimiento Libertario es otro caso del absurdo de la legislación electoral: la creación de los Bonos A, B, etc. fue una completa estupidez en un sistema financiero como el nuestro, dominado por la Banca. Además, en un absurdo que no se repetía por un cuarto de siglo en el país, la tasa de interés de los bonos se fijó por ley. Acaso la experiencia anteriro no demostraba que los precios fijados por ley son un absurdo?

    Además de no ser los intereses suficientmente atractivos para atraer financistas institucionales (dado que el favoritismo del electorado era muy volátil), al final creó incentivos perversos que metieron en problemas a varios candidatos.

    El ejemplo de Otto Guevara es bastante evidente: Su partido necesitaba financiamiento y el estaba dispuesto a darlo, poniendo sus propiedades como prenda, para luego pagar el préstamo con el dinero de la Deuda Política. El gran problema era que, aún cuando no quería obtener una ganancia en intereses, por ley tenía que hacerlo, debido a la fijación de la tasa de interés de los bonos. Lo que hacía que, al serle devuelto el dinero por medio de los bonos, parte del pago habría sido por concepto de intereses, aún cuando su patrimonio no hubiera aumetnado por la operación financiera! Viéndolo así, y para no aprovecharse del Libertario, Guevara debió recurrir a movimientos financieros y conseguir financistas, con el resultado lamentable que se dió después.

    Si en lugar de bonos, el Estado hubiera proveído una garantía directa a los partidos establecidos, quizás hubiera sido mejor. O no haber limitado las tasas de interés, para que fueran fijadas por el mercado (aunque en este caso, el mercado es bastante poco profundo).

    Lo triste es que se pierda tanto tiempo por un debate que es de tan poca monta. Y por delitos uqe en realdiad no existen. No pongo las manos al fuego por la clase política criolla. Pero la corrupción del país no alcanza los niveles estratosféricos de otros lugares, incluso economías desarrolladas. Nos estamos ahogando en un vaso de agua.

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