Los corresponsales de La Suiza Centroamericana en el Medio Oriente lograron captar
la conversación privada que sostuvieron Vladimir Putin y Barack Obama la semana pasada en Rusia, en el marco de
la cumbre del G-20. A continuación
transcribimos lo más relevante de dicha conversación.
Barack Obama (BO): Diay, Vladimir, ¿por qué estás tan
opuesto a que le vuele bala al carnicero de Assad? ¿No ves que me estás
complicando las cosas?
Vladimir Putin (VP): Mirá, Barack, vos son todo un
Premio Nobel de la Paz. ¿Cómo se te ocurre andar queriendo bombardear a mi
amigo Bashar?
BO: Dejate de playadas, Vladi, vos bien sabés que yo
no pedí ese premio, ni hice nada para ganármelo. Que me lo dieron por oponerme
a las invasiones de Bush. ¿Qué querían? ¿Qué no me opusiera a Bush siendo yo el
ungido de la oposición a Bush?
VP: Bueno, bueno, ya que nos sinceramos, te cuento.
La vara es que mi amigo Assad es un buen cliente de la industria armamentista
rusa, y a cómo va la economía mundial, no puedo darme el lujo de perder a un
cliente tan importante. No me sirve que
me lo quités del poder, porque después los que le sigan no me van a querer
comprar nada.
BO: Haberlo dicho, mae. Si yo no quiero quitar a Assad, sólo
pegarle un sustillo. ¿Te imaginás la cagada que sería que bajo mi tutela Al
Qaeda se adueñe de Siria? El Partido Demócrata perdería las elecciones
congresionales del próximo año, y los republicanos me harían la vida imposible
los últimos dos años de mi mandato.
VP: Entonces, ¿qué proponés?
BO: Diay maje, decime vos cuánto daño querés que le
cause al Ejército Sirio, para que te tengan que comprar las armas de repuesto…
VP: ¿Qué te parece si vos anunciás una intervención
limitada, sin invasión de tropas terrestres, y yo te paso unas cuantas
coordenadas para bombardear? Así los dos
salimos ganando. Me entenderás, eso sí, que para consumo interno de mi
electorado yo voy a tener que seguir oponiéndome públicamente a cualquier intervención
militar gringa.
BO: Pucha, no seas así. Vos sabés que yo represento
al partido “pacifista” en Estados Unidos, y ahora los Republicanos se la
quieren tirar de paloma de la paz. Hasta parece que nacieron del riñón de Oscar Arias.
VP: Oscar WHO?
BO: Oscar Arias, el ex Presidente de Costa Rica, colega Nobel de la Paz. Pero eso es irrelevante, Vladi. La vara es que a mí nadie me va a apoyar en Estados Unidos si vos seguís con el discurso anti guerra. La verdad, mi'herma, es que me cuiteo en los calzonillos ante la posibilidad de atacar. No lo quiero hacer. Pero por bocón ahora no tengo salida.
VP: Oscar WHO?
BO: Oscar Arias, el ex Presidente de Costa Rica, colega Nobel de la Paz. Pero eso es irrelevante, Vladi. La vara es que a mí nadie me va a apoyar en Estados Unidos si vos seguís con el discurso anti guerra. La verdad, mi'herma, es que me cuiteo en los calzonillos ante la posibilidad de atacar. No lo quiero hacer. Pero por bocón ahora no tengo salida.
VP: ¡Qué varas las tuyas, Barry! Pareciera que yo fuera el demócrata entre
nosotros dos. No seas tan huevón. Llamate a John Kerry de una vez y decile que meta
esta vara al Congreso. Si querés te
presto el teléfono rojo para que lo llamés sin interferencia.
Si el Congreso te dice que no, te saliste con la tuya pudiendo echarles
la culpa a los diputados. Y si te respalda, entonces podés repartir las culpas
si la operación te falla. Me imagino que lo que no querés es asumir vos solo
esa responsabilidad…
BO: Puta, mae, haberlo pensado antes. Con un poco de
suerte me pasa las de David Cameron en Inglaterra. Pero mae, ¿y si me dicen que si? No te digo que me hago en los fustanes…
VP: Diay jetas, entonces dame unos días para
convencer a Assad de que le vas a dar en la torre, y que su única salvación es
sacrificar su arsenal químico.
Así le volamos bimba a esa porquería. No creás, a mí también me asusta la probabilidad de que ese arsenal caiga en manos
de los rebeldes y que por medio de Al Qaeda parte llegue a los chechenos. Eso
si, platanazo, tenés que proclamar a los cuatro vientos que al Congreso solo le estás pidiendo apoyo, no
permiso, y que estás dispuesto a seguir con el ataque aún si el Congreso te
serrucha el piso. Seguí con el tono amenazante. Si no, Assad no se la traga.
BO: No se qué haría sin vos, Vladi.
VP: Pero esta vez haceme caso, animal. Que no te pase
como cuando te advertí del par de extremistas aquellos y no me diste pelota.
BO: ¿De qué me hablas, Willys?
VP: Si serás…
De los hermanos Tsarnaev, bestia, los de la maratón de Boston.
Qué hijo de Putín más pipa...
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